El 080 Barcelona Fashion acoge la «Nobody’s Road» de Yerse, una colección con un objetivo muy claro: darle un buen chute de poderío a las mujeres.
Una cosa puede decirse: todavía hay quien opina que la apertura del 080 Barcelona Fashion a las marcas (y no sólo a los diseñadores emergentes) es una traición al espíritu del evento, pero lo cierto es que, si hubiera más desfiles como el de Yerse, esas voces ya no tendrían ningún tipo de argumento que defender. Y es que esta firma con más de cincuenta años de historia es de las pocas que suelen poner sobre la pasarela un discurso mínimamente coherente: puede que no sea un discurso elevado y abstracto como el de ciertos diseñadores, pero la apuesta eterna de Yerse por el buen rollo y por el empoderamiento femenino siempre tiene que ser recibido con los brazos abiertos.
Para esta ocasión, y bajo el título de «Nobody’s Road«, Yerse vuelve a proponer una colección para que la mujer sienta cómo le sube el poderío desde la punta de los dedos de los pies hasta el último pelo de su cabeza. «Ser libre es ser tú. De verdad y sin malentendidos. Es escoger hacia dónde quieres dirigirte. Cómo quieres vivir. Evolucionar. Menear la rutina hasta inventar tu propia ruta. Marcar tu dirección«, estas son las palabras con las que Yerse han definido su «Nobody’s Road«. Y soy consciente de que, para muchos, estas palabras son puro cliché. Pero otra cosa os dejo clara: no subestiméis el poder del cliché. Nunca.
Todo en «Nobody’s Road» está puesto al servicio de una idea última: que hagas tuya esta carretera por la que te ha tocado conducir a toda pastilla.
Y es que, al fin y al cabo, esta colección de Yerse se quita de encima cualquier cliché posible gracias a los estampados de flores (conjuntados con las exuberantes flores de los tocados de las modelos y sus collares con pompones flores muy vistosos), los colores vivos sin llegar al extremo de lo chillón, los estampados para todos los gustos, la aparición con fuerza del concepto unisuit, los pantalones blancos de talle alto, las rejillas y blondas que aportan frescor a las siluetas, las formas amplias y confortables… Todo en «Nobody’s Road» está puesto al servicio de una idea última: que hagas tuya esta carretera por la que te ha tocado conducir a toda pastilla.