Gaysper es el fantasma LGBTIQ contra el que Vox quiere luchar… Y que se ha convertido en un icono de masas entrevistado por Buenafuente.
Ya han pasado las elecciones del 28 de abril y España ha demostrado que, vale, hay un reducto para el pensamiento de extrema derecha, pero que es un reducto mucho menor del que muchos predecían. Y, precisamente por eso, ahora llega el momento de reírse de Vox. Porque sí. Porque suficiente se han quedado con nosotros como para que ahora nosotros no vayamos a permitirnos reírnos en su cara… Tal y como está sucediendo con Gaysper, ese maravilloso fantasma LGBTIQ que salió de la mente (mal)pensante de algún tarado de Vox y que se le ha vuelto en contra del partido.
Pero empecemos por el principio, que no es otro que un tuit de Vox que se publicó en la cuenta oficial del partido en el mismo día de las elecciones. El tuit era el que sigue…
¡Manda cojones! Vamos, que apropiándose (y, de nuevo, malinterpretando) una imagen de “El Señor de los Anillos“, Vox venía a decir que era el Paladín de España y que no tenía miedo a enfrentarse a anarquistas, comunistas y republicanos, a medios de comunicación enemigos como El País, La Ser y La Sexta y, rizando el rizo a algunos colectivos a los que le tienen declarada una guerra abierta, tal y como las feministas y la comunidad LGBTIQ. Lo gracioso es que la comunidad LGBTIQ estaba representada por un fantasma boniquísimo que, en vez de vestir una sábana blanca, va cubierto con una bandera del arcoíris.
Y, mira, es que no sabemos a quién puede dar miedo una figura tan monísima… Una figura que inmediatamente se ha convertido en una especie de icono absoluto en redes sociales al que la mayoría denominan como Gaysper (en referencia a Casper, obvio) y que otros prefieren llamar Fantasmarica. Un icono que, de hecho, incluso ha sido entrevistado por Buenafuente en un divertidísimo gag en el que la voz de nuestro amigo Gaysper es ni más ni menos que la de Bob Pop.
¿Puede llevar esta locura deliciosa hasta un extremo más bestia? Yes we can! Y es que resulta que, en toda esta ola mediática que cabalga Gaysper, el diseñador gráfico Fran Rojo decidió darle compañeros de aventura al personaje, y el resultado fue tal que así…
Según nos comenta el mismo Fran Rojo, el fantasma original usado por Vox es un icono de Android 5 que, en el año 2015, alguien convirtió en un fantasma gay, otro lésbico y un último bisexual. Estas nuevas versiones se pueden comprar de forma comercial… Y es de suponer que de ahí lo sacó Vox. Por su parte, lo que hizo Rojo fue completar el elenco de fantasmas con otras de las comunidades dentro del colectivo LGBTIQ: transexuales, intersexuales, asexuales, osos, etc. Y los puso para descargar en su propia web (siguiendo este link) tanto en formato vectorial como en png, para que los use quien quiera.
Porque, evidentemente, un icono de este tamaño no puede ni debe ser vendido en un web de tres al cuarto: es algo que tiene que fluir de forma natural y gratuita. Así que, ahora, simple y llanamente, falta que te hagas amigo de Gaysper y sus amigos… Y que los viralices como si no hubiera un mañana. Porque, en este caso, lo sentimos, a Gaysper solito le basta y la sobra para vencer a Vox en esta batalla de “El Señor de los Anillos“.