Los Deafkids actuaron en el festival Sinsal Primavera 2024 para llevar a cabo una “desprogramación sónica” de la mente… Y aquí te explicamos todo lo que ocurrió.
Los asistentes a los eventos organizados por la promotora viguesa SinsalAudio saben que el factor sorpresa es uno de los puntos que los distinguen en muchos casos de otros conciertos al uso. Esta situación se produce especialmente cuando se desconoce qué artistas se van a subir al escenario, como sucede en el festival Sinsal que se celebra en la isla de San Simón (Redondela, Pontevedra) cada verano, pero también ocurre cuando se sabe con antelación quiénes son los protagonistas del cartel.
La prueba palpable de ello se materializó el año pasado en la edición inaugural del Sinsal Primavera: un ciclo de directos desarrollado en Vigo que funcionó en cierta manera como una versión urbana y bajo techo del certamen isleño descrito al principio gracias a una serie de nombres -en su gran mayoría femeninos- que apostaban por la vanguardia sonora, el riesgo creativo y la experimentación en vivo.
El arranque del Sinsal Primavera 2024 -realizado otra vez en la ciudad olívica y distribuido en tres jornadas diferentes- no solo mantuvo esa misma línea, sino que la llevó por un derrotero radical, furibundo y frenético. No era para menos, ya que esta línea estaba impulsada por las ágiles manos de Deafkids, grupo brasileño cuyo propósito se basa en la “desprogramación sónica” de la mente a través de un rock mutante que transita por el noise, el hardcore, el punk extremo y el metal.
Con el fin de no corromper la singularidad característica de las citas de SinsalAudio, resultó ser una buena idea acudir a la sala Radar de Vigo el 5 de abril sin haber escuchado una sola nota del trío formado por Douglas Leal, Marcelo dos Santos y Mariano de Melo. De esta forma, el cuerpo se abría completamente a sus oleadas sonoras desde el primer minuto.
En cuanto cuajó la atmósfera amazónica que habían comenzado a construir en el inicio, Deafkids introdujeron a la audiencia en su selva eléctrica con una fuerza inusitada. Eran solo tres, sí, pero parecían una manada de búfalos desbocados que aceleraban su paso al son del bajo pronunciado de Marcelo, las percusiones polirrítmicas de Mariano (un metrónomo a las baquetas tan preciso como demoledor) y los pesados y atronadores riffs guitarreros más los efectos de Douglas, quien además añadía voces amorfas y espectrales que multiplicaban el impacto psicodélico de su particular ritual chamánico.
Así se definió la actuación de Deafkids en el Sinsal Primavera 2024: una ceremonia en la que se alcanzaban diversos estados de consciencia y hasta se podía bailar de forma dislocada entre mantras de distorsión, mientras surgían sensaciones de desconcierto o confusión cuando el ruido generado -y perfectamente controlado- por el trío rozaba el umbral soportable por el oído humano. En determinados momentos se vivió algo similar a un colocón sonoro: si Spiritualized, por ejemplo, son capaces de transformar en vibraciones un subidón de setas alucinógenas, Deafkids consiguieron trasladar con su arrollador despliegue la colisión del peyote contra las neuronas.
Ni siquiera en el desenlace Deafkids permitieron que descendiera el nivel de energía y potencia… Su implacable directo devino en una experiencia apabullante que alteró todos y cada uno de los sentidos. [FOTOS: Stephanie Whybrow] [Más información en el Instagram de Deafkids y en la web del Festival Sinsal]
